Paralizada la tala en San Pedro de Rocas (de momento)

Seguro que en estos días habréis oído hablar de la posible tala de árboles centenarios y autóctonos en los alrededores de el monasterio rupestre de San Pedro de Rocas, en Esgos, incluido en la Ribeira Sacra, candidata esta a ser Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Después de 1.500 años parece ser que es necesaria la ampliación de la carretera que sube hasta este fantástico cenobio, pues los autocares tienen problemas sin coinciden en este tramo de cerca de 800 metros, además de las dificultades para girar hacia esta carretera en la parte de abajo.

Que un lugar atraiga visitas suele ser por una serie de factores, que una zona pretenda incluirse en la lista de Patrimonio de la Humanidad también suele ser por las características únicas que hacen que estos se diferencien del resto. Imaginaos si hiciéramos un puente hasta las islas Cíes, sería por la simple comodidad de los visitantes, ¿no? Pues en Rocas pasa algo similar; el entorno que envuelve a los alrededores forma parte también de este monumento que es uno de los primeros monasterios cristianos conocidos. ¿Por qué quitarle la esencia? ¿Acaso hay algo que imposibilita la visita al monasterio de San Pedro de Rocas?

Además sí para ello debemos talar más de un centenar de árboles centenarios que conforman en la actualidad la belleza del ascenso y los alrededores pues peor aún. Permisos existen, de la Diputación, la Xunta y de Patrimonio, pero está claro que el permiso de toda la sociedad que ama el patrimonio no lo tiene y eso también debería juzgarse al realizar obras de este tipo.

Paralizada la tala de árboles

Después de varias denuncias de asociaciones ecologistas y patrimoniales como Amigos da Terra, Amigos das Árbores o la Asociación para a Defensa do Patrimonio Cultural Galego (Apatrigal) y que el asunto recorriera las portadas de decenas de periódicos de nivel nacional, ha tenido que ser el propietario afectado de una de las fincas que le fue expropiada el que ha paralizado momentáneamente la tala al interponer un contencioso administrativo y en el que añade que no son 83 árboles los afectados, sino que 114 de las proximidades del acceso al monasterio de San Pedro de Rocas.